Temas como: la drogadicción, la soledad de las personas, la incomprensión, las estafas telefónicas, las nuevas tecnologías, la exclusión social, el bulling, etc, son tratados en este proyecto, a través de diferentes historias que pretenden ser un hilo conductor para poder dar visibilidad a las diferentes maneras de afrontar los problemas, según qué situaciones. Las decisiones que tomamos en la vida, nos
Las altas capacidades intelectuales (AACCII) presentan un reto significativo tanto para las familias como para el sistema educativo actual. La intervención educativa dirigida a este tipo de alumnado debe basarse en un enfoque colaborativo, en el cual las familias desempeñan un rol fundamental. En este artículo, se analizará la importancia de la participación familiar en la educación de los niños y niñas con AACCII, se ofrecerán orientaciones para apoyar su desarrollo y se plantearán estrategias para fortalecer la relación entre la familia y la escuela.
Diversas investigaciones destacan la influencia de la familia en el desarrollo cognitivo y emocional del alumnado con AACCII. Según Albes, Pérez y Morales (2013), la participación activa de las familias en el proceso educativo favorece el desarrollo integral del alumno/a, proporcionando un entorno de comprensión y estimulación adecuado. De igual manera, la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (CEAPA, 2013) enfatiza la importancia de que las familias estén informados sobre las necesidades específicas de sus hijos e hijas, y colaboren estrechamente con los centros educativos para garantizar una respuesta adecuada.
La respuesta educativa para el alumnado con altas capacidades intelectuales debe ser integral y diversa, teniendo en cuenta una serie de aspectos, entre los que cabe destacar:
- Identificación y valoración temprana de las AACCII: la detección precoz de los signos de AACCII es fundamental para diseñar intervenciones educativas apropiadas desde los primeros años de vida. Además, estos signos deben ser confirmados objetivamente mediante evaluaciones psicopedagógicas, las cuales permiten identificar a los niños y niñas con estas características (García & Sánchez, 2014).
- Implementación de adaptaciones curriculares: el sistema educativo tiene la responsabilidad de proporcionar medidas específicas para el enriquecimiento y ampliación del currículo, asegurando que las necesidades de aprendizaje de este alumnado sean atendidas. De esta forma, se previenen dificultades asociadas a una educación poco diferenciada (Serrano & López, 2015).
- Programas de mentoría y aceleración: estas estrategias son esenciales para el desarrollo de las habilidades y potencialidades del alumnado con AACCII, favoreciendo un aprendizaje más acelerado y ajustado a su ritmo cognitivo (Hernández & Pérez, 2016).
- Colaboración familia-escuela: familia y escuela deben trabajar en conjunto, creando espacios para la reflexión, participación y diálogo entre ambos, con el fin de optimizar la educación del alumnado con AACCII (Ramos & Ortega, 2017).
El núcleo familiar desempeña un papel crucial en la educación de sus hijos e hijas, por tanto entre las recomendaciones generales que se aconsejan cabe destacar las siguientes acciones:
- Estimular y fomentar un ambiente de aprendizaje en casa mediante la estimulación intelectual y el acceso a recursos educativos, realizando un monitoreo de todas las estrategias implementadas.
- Apoyar el desarrollo emocional, promoviendo el autoconcepto y la autoestima de sus hijos e hijas, así como la gestión de emociones.
- Establecer una comunicación fluida y colaborativa con los agentes educativos para compartir inquietudes y expectativas con respecto al alumnado con AACCII.
- Facilitar el acceso a actividades extracurriculares que potencien sus talentos, apoyándolos y comprendiéndolos.
Para consolidar una alianza firme entre la familia y el centro educativo, se sugieren las siguientes estrategias:
- Organizar cronogramas de reuniones periódicas entre docentes y familias para evaluar el progreso del alumnado.
- Diseñar planes de acción conjuntos que atiendan las necesidades individuales de cada alumno/a.
- Implementar talleres y formaciones para familias de alumnado que presenta AACCII.
- Diseñar redes de apoyo entre familias con experiencias similares.
Para finalizar, señalar que la colaboración entre las familias y los centros educativos es un factor clave para el éxito del alumnado con AACCII. Es fundamental que ambas partes trabajen de forma conjunta y colaborativa para garantizar una educación equitativa y adaptada a las necesidades individuales. A pesar de la relevancia de este enfoque, persisten desafíos significativos en la implementación de estrategias efectivas. En muchos contextos, la falta de formación específica para los docentes y las familias limita la capacidad de respuesta ante las necesidades del alumnado con AACCII. Además, la escasa sensibilización sobre la diversidad cognitiva y emocional de este tipo de alumnado puede generar brechas en la atención que requieren. Por lo tanto, se hace imprescindible avanzar hacia un sistema educativo que no solo reconozca la diversidad intelectual, sino que también la valore y promueva mediante políticas educativas inclusivas y planes de formación continua tanto para educadores como para familias.
Referencias bibliográficas
Albes, J., Pérez, M., & Morales, T. (2013). La influencia de la familia en el desarrollo cognitivo y emocional de los niños con altas capacidades. Editorial Universitaria.
CEAPA. (2013). La participación de las familias en el proceso educativo: Un reto para el sistema educativo español. Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos.
García, A., & Sánchez, M. (2014). La detección temprana de altas capacidades: Un análisis de las prácticas educativas actuales. Revista de Psicología Educativa, 20(2), 112-128.
Hernández, J., & Pérez, C. (2016). E
strategias para el desarrollo de las altas capacidades intelectuales en el aula. Educación y Desarrollo, 5(3), 34-45.
Ramos, F., & Ortega, L. (2017). Colaboración familia-escuela: Un modelo de éxito en la educación de los niños con altas capacidades. Revista Internacional de Educación y Pedagogía, 22(1), 25-40.
Serrano, I., & López, J. (2015). Adaptaciones curriculares en la educación para alumnado con altas capacidades. Editorial Académica.
Junta de Andalucía, Consejería de Educación. (s.f.). Altas capacidades intelectuales. Recuperado de: http://www.juntadeandalucia.es/educacion/webportal/web/escuela-de-familias/neae/altas-capacidades-intelectuales
Ángela Clemente Marín
dicionan. Cometemos errores por falta de información, por falta de experiencia, por no tener las herramientas necesarias para hacer frente a los distintos retos del día a día o por no saber utilizarlas adecuadamente. Sea como fuere, todo el mundo puede aprender a enfrentar esos desafíos personales mediante la comunicación, la información y los medios puestos a su alcance.
Creo firmemente en el poder de la enseñanza y la prevención. Una persona informada, es una persona empoderada.
He tenido el placer de poder contar con la colaboración del CEPER Juan Ramón Jiménez (Algeciras), a través de su directora Ana Sánchez García, dónde alumnos del centro han asistido en primicia, al visionado del primero de los proyectos de cortometraje “Si, soy yo (La llamada). Después del visionado, se ha llevado a cabo una charla/taller activa entre todos los asistentes, creando un espacio para la reflexión, el aprendizaje y el intercambio de experiencias personales. Dando la palabra a todos los asistentes y animándolos a participar, se crea un ambiente relajado y familiar.
Los siguientes proyectos de cortometraje son: “MALA MENTE” Y “TODO ESTA BIEN”
Construyendo puentes. Estrategias de colaboración entre familia y escuela para el alumnado con Altas Capacidades Intelectuales
Las altas capacidades intelectuales (AACCII) presentan un reto significativo tanto para las familias como para el sistema educativo actual. La intervención educativa dirigida a este tipo de alumnado debe basarse en un enfoque colaborativo, en el cual las familias desempeñan un rol fundamental. En este artículo, se analizará la importancia de la participación familiar en la educación de los niños y niñas con AACCII, se ofrecerán orientaciones para apoyar su desarrollo y se plantearán estrategias para fortalecer la relación entre la familia y la escuela.
Diversas investigaciones destacan la influencia de la familia en el desarrollo cognitivo y emocional del alumnado con AACCII. Según Albes, Pérez y Morales (2013), la participación activa de las familias en el proceso educativo favorece el desarrollo integral del alumno/a, proporcionando un entorno de comprensión y estimulación adecuado. De igual manera, la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (CEAPA, 2013) enfatiza la importancia de que las familias estén informados sobre las necesidades específicas de sus hijos e hijas, y colaboren estrechamente con los centros educativos para garantizar una respuesta adecuada.
La respuesta educativa para el alumnado con altas capacidades intelectuales debe ser integral y diversa, teniendo en cuenta una serie de aspectos, entre los que cabe destacar:
- Identificación y valoración temprana de las AACCII: la detección precoz de los signos de AACCII es fundamental para diseñar intervenciones educativas apropiadas desde los primeros años de vida. Además, estos signos deben ser confirmados objetivamente mediante evaluaciones psicopedagógicas, las cuales permiten identificar a los niños y niñas con estas características (García & Sánchez, 2014).
- Implementación de adaptaciones curriculares: el sistema educativo tiene la responsabilidad de proporcionar medidas específicas para el enriquecimiento y ampliación del currículo, asegurando que las necesidades de aprendizaje de este alumnado sean atendidas. De esta forma, se previenen dificultades asociadas a una educación poco diferenciada (Serrano & López, 2015).
- Programas de mentoría y aceleración: estas estrategias son esenciales para el desarrollo de las habilidades y potencialidades del alumnado con AACCII, favoreciendo un aprendizaje más acelerado y ajustado a su ritmo cognitivo (Hernández & Pérez, 2016).
- Colaboración familia-escuela: familia y escuela deben trabajar en conjunto, creando espacios para la reflexión, participación y diálogo entre ambos, con el fin de optimizar la educación del alumnado con AACCII (Ramos & Ortega, 2017).
El núcleo familiar desempeña un papel crucial en la educación de sus hijos e hijas, por tanto entre las recomendaciones generales que se aconsejan cabe destacar las siguientes acciones:
- Estimular y fomentar un ambiente de aprendizaje en casa mediante la estimulación intelectual y el acceso a recursos educativos, realizando un monitoreo de todas las estrategias implementadas.
- Apoyar el desarrollo emocional, promoviendo el autoconcepto y la autoestima de sus hijos e hijas, así como la gestión de emociones.
- Establecer una comunicación fluida y colaborativa con los agentes educativos para compartir inquietudes y expectativas con respecto al alumnado con AACCII.
- Facilitar el acceso a actividades extracurriculares que potencien sus talentos, apoyándolos y comprendiéndolos.
Para consolidar una alianza firme entre la familia y el centro educativo, se sugieren las siguientes estrategias:
- Organizar cronogramas de reuniones periódicas entre docentes y familias para evaluar el progreso del alumnado.
- Diseñar planes de acción conjuntos que atiendan las necesidades individuales de cada alumno/a.
- Implementar talleres y formaciones para familias de alumnado que presenta AACCII.
- Diseñar redes de apoyo entre familias con experiencias similares.
Para finalizar, señalar que la colaboración entre las familias y los centros educativos es un factor clave para el éxito del alumnado con AACCII. Es fundamental que ambas partes trabajen de forma conjunta y colaborativa para garantizar una educación equitativa y adaptada a las necesidades individuales. A pesar de la relevancia de este enfoque, persisten desafíos significativos en la implementación de estrategias efectivas. En muchos contextos, la falta de formación específica para los docentes y las familias limita la capacidad de respuesta ante las necesidades del alumnado con AACCII. Además, la escasa sensibilización sobre la diversidad cognitiva y emocional de este tipo de alumnado puede generar brechas en la atención que requieren. Por lo tanto, se hace imprescindible avanzar hacia un sistema educativo que no solo reconozca la diversidad intelectual, sino que también la valore y promueva mediante políticas educativas inclusivas y planes de formación continua tanto para educadores como para familias.
Referencias bibliográficas
Albes, J., Pérez, M., & Morales, T. (2013). La influencia de la familia en el desarrollo cognitivo y emocional de los niños con altas capacidades. Editorial Universitaria.
CEAPA. (2013). La participación de las familias en el proceso educativo: Un reto para el sistema educativo español. Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos.
García, A., & Sánchez, M. (2014). La detección temprana de altas capacidades: Un análisis de las prácticas educativas actuales. Revista de Psicología Educativa, 20(2), 112-128.
Hernández, J., & Pérez, C. (2016). E
strategias para el desarrollo de las altas capacidades intelectuales en el aula. Educación y Desarrollo, 5(3), 34-45.
Ramos, F., & Ortega, L. (2017). Colaboración familia-escuela: Un modelo de éxito en la educación de los niños con altas capacidades. Revista Internacional de Educación y Pedagogía, 22(1), 25-40.
Serrano, I., & López, J. (2015). Adaptaciones curriculares en la educación para alumnado con altas capacidades. Editorial Académica.
Junta de Andalucía, Consejería de Educación. (s.f.). Altas capacidades intelectuales. Recuperado de: http://www.juntadeandalucia.es/educacion/webportal/web/escuela-de-familias/neae/altas-capacidades-intelectuales
Ángela Clemente Marín
Construyendo puentes. Estrategias de colaboración entre familia y escuela para el alumnado con Altas Capacidades Intelectuales
Las altas capacidades intelectuales (AACCII) presentan un reto significativo tanto para las
familias como para el sistema educativo actual. La intervención educativa dirigida a este tipo
de alumnado debe basarse en un enfoque colaborativo, en el cual las familias desempeñan un
rol fundamental. En este artículo, se analizará la importancia de la participación familiar en la
educación de los niños y niñas con AACCII, se ofrecerán orientaciones para apoyar su
desarrollo y se plantearán estrategias para fortalecer la relación entre la familia y la escuela.
Diversas investigaciones destacan la influencia de la familia en el desarrollo cognitivo y
emocional del alumnado con AACCII. Según Albes, Pérez y Morales (2013), la participación
activa de las familias en el proceso educativo favorece el desarrollo integral del alumno/a,
proporcionando un entorno de comprensión y estimulación adecuado. De igual manera, la
Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (CEAPA, 2013)
enfatiza la importancia de que las familias estén informados sobre las necesidades específicas
de sus hijos e hijas, y colaboren estrechamente con los centros educativos para garantizar una
respuesta adecuada.
La respuesta educativa para el alumnado con altas capacidades intelectuales debe ser integral
y diversa, teniendo en cuenta una serie de aspectos, entre los que cabe destacar:
1. Identificación y valoración temprana de las AACCII: la detección precoz de los signos
de AACCII es fundamental para diseñar intervenciones educativas apropiadas desde
los primeros años de vida. Además, estos signos deben ser confirmados objetivamente
mediante evaluaciones psicopedagógicas, las cuales permiten identificar a los niños y
niñas con estas características (García & Sánchez, 2014).
2. Implementación de adaptaciones curriculares: el sistema educativo tiene la
responsabilidad de proporcionar medidas específicas para el enriquecimiento y
ampliación del currículo, asegurando que las necesidades de aprendizaje de este
alumnado sean atendidas. De esta forma, se previenen dificultades asociadas a una
educación poco diferenciada (Serrano & López, 2015).
3. Programas de mentoría y aceleración: estas estrategias son esenciales para el
desarrollo de las habilidades y potencialidades del alumnado con AACCII, favoreciendo
un aprendizaje más acelerado y ajustado a su ritmo cognitivo (Hernández & Pérez,
2016).
4. Colaboración familia-escuela: familia y escuela deben trabajar en conjunto, creando
espacios para la reflexión, participación y diálogo entre ambos, con el fin de optimizar
la educación del alumnado con AACCII (Ramos & Ortega, 2017).
El núcleo familiar desempeña un papel crucial en la educación de sus hijos e hijas, por tanto
entre las recomendaciones generales que se aconsejan cabe destacar las siguientes acciones:
Estimular y fomentar un ambiente de aprendizaje en casa mediante la estimulación
intelectual y el acceso a recursos educativos, realizando un monitoreo de todas las
estrategias implementadas.
Apoyar el desarrollo emocional, promoviendo el autoconcepto y la autoestima de sus
hijos e hijas, así como la gestión de emociones.
Establecer una comunicación fluida y colaborativa con los agentes educativos para
compartir inquietudes y expectativas con respecto al alumnado con AACCII.
Facilitar el acceso a actividades extracurriculares que potencien sus talentos,
apoyándolos y comprendiéndolos.
Para consolidar una alianza firme entre la familia y el centro educativo, se sugieren las
siguientes estrategias:
Organizar cronogramas de reuniones periódicas entre docentes y familias para evaluar
el progreso del alumnado.
Diseñar planes de acción conjuntos que atiendan las necesidades individuales de cada
alumno/a.
Implementar talleres y formaciones para familias de alumnado que presenta AACCII.
Diseñar redes de apoyo entre familias con experiencias similares.
Para finalizar, señalar que la colaboración entre las familias y los centros educativos es un
factor clave para el éxito del alumnado con AACCII. Es fundamental que ambas partes trabajen
de forma conjunta y colaborativa para garantizar una educación equitativa y adaptada a las
necesidades individuales. A pesar de la relevancia de este enfoque, persisten desafíos
significativos en la implementación de estrategias efectivas. En muchos contextos, la falta de
formación específica para los docentes y las familias limita la capacidad de respuesta ante las
necesidades del alumnado con AACCII. Además, la escasa sensibilización sobre la diversidad
cognitiva y emocional de este tipo de alumnado puede generar brechas en la atención que
requieren. Por lo tanto, se hace imprescindible avanzar hacia un sistema educativo que no solo
reconozca la diversidad intelectual, sino que también la valore y promueva mediante políticas
educativas inclusivas y planes de formación continua tanto para educadores como para
familias.
Referencias bibliográficas
Albes, J., Pérez, M., & Morales, T. (2013). La influencia de la familia en el desarrollo cognitivo y
emocional de los niños con altas capacidades. Editorial Universitaria.
CEAPA. (2013). La participación de las familias en el proceso educativo: Un reto para el sistema
educativo español. Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos.
García, A., & Sánchez, M. (2014). La detección temprana de altas capacidades: Un análisis de
las prácticas educativas actuales. Revista de Psicología Educativa, 20(2), 112-128.
Hernández, J., & Pérez, C. (2016). E
strategias para el desarrollo de las altas capacidades intelectuales en el aula. Educación y
Desarrollo, 5(3), 34-45.
Ramos, F., & Ortega, L. (2017). Colaboración familia-escuela: Un modelo de éxito en la
educación de los niños con altas capacidades. Revista Internacional de Educación y Pedagogía,
22(1), 25-40.
Serrano, I., & López, J. (2015). Adaptaciones curriculares en la educación para alumnado con
altas capacidades. Editorial Académica.
Junta de Andalucía, Consejería de Educación. (s.f.). Altas capacidades
intelectuales. Recuperado
de: http://www.juntadeandalucia.es/educacion/webportal/web/escuela-de-
familias/neae/altas-capacidades-intelectuales
Ángela Clemente Marín
