Comenzamos de nuevo, cada sector en su universo profesional y empiezan a aparecer las críticas, las opiniones de expertos que no lo son en nada y llegan de nuevo, los Congresos EDUCATIVOS, Congresos que, si no son serios, objetivos y arcaicos parece que no son fiables. Ahora se critica mucho que en los Congresos los ponentes, bailen, cierren con dinámicas divertidas o pongan música… críticas que en la mayoría de los casos suelen emitirse en foros donde el aburrimiento de lo tradicional, marca la técnica de actuación y la filosofía vital de sus estructuras.
Los llamados expertos, se lanzan a juzgar y a hacer crítica destructiva de todo lo que es diferente, eso sí, se atreven a su vez, a potenciar que en las escuelas se debe romper el sistema de transmisión de conocimientos, abalando teorías de las nuevas corrientes que ponen el acento en el protagonismo del alumnado. Pero de nuevas, no tienen nada de nada, salvo el origen de las bases y el sustento pedagógico, que allá por el siglo XIX ya solidificaban laos cimientos y la necesidad imperiosa de manipular, tocar, experimentar…. Por lo tanto, la hipocresía intelectual sale a relucir.
Si queremos que nuestros niños y niñas tengan un modelo educativo de éxito, los maestros y maestras deben formarse más allá de teorías, que sirven para tener criterio pero que requieren de realidad.
Investigando y leyendo, descubrimos que las formaciones dinámicas, activas y que nos conectan con el entorno, dan como resultado, procesos exitosos, procedimientos y desarrollo de estrategias por y para la vida.
No tenemos que irnos muy atrás en el tiempo para corroborar como al parte afectiva, social, artística y deportiva nos salvó de la pandemia. Se convirtieron en la razón social de supervivencia, aportando esa falta de vida fuera del hogar que todo ser humano añoraba. En ese momento cualquier excusa para cantar, moverse, bailar, saltar…estaba justificada, comprobando que necesitamos dinamismo. Alegría, dopamina …para sentir que estamos vivos.
Ahora en este tipo de eventos, esas herramientas que ayudan a acercarse, a socializar, a conectar, nos sirven de puente para acercarnos a las personas que quieren aprender, no cogiendo apuntes, sino desde su propia experiencia.
Todo el ámbito artístico y cultural implican transformación y evolución, pues son inherentes al desarrollo y al avance. Tienen una función social, emocional, integral en todo sistema interactivo. Afortunadamente, son indispensables en toda actividad educativa, provocando esa unión de raíz con el mundo que nos rodea y de vez en cuando nos abruma y aplasta.
En los Congresos donde hay vida, hay movimiento y en definitiva hay desarrollo cognitivo, afectivo y sensorial. Nos invita al desarrollo de habilidades sociales, a empatizar, a comprender a los demás y a cooperar para lograr sueños compartidos.
Abogamos por la inclusión desde el cinismo de teorías leídas en manuscritos y libros, que, si no son aplicables a la realidad, se quedan en eso, en simples lecturas. Cuando eres capaz de incluirte, podrás incluir, cuando eres capaz de compartir podrás enseñara compartir, cuando eres capaz de ser, lograrás que otros sean, pero si todo se reduce a la hipocresía del intelecto camuflado en páginas necesarias pero que requieren de práctica, estarás perdido en al opinión y valoración vacía y gratuita.
Cuando las personas que exponen y proyectan lo que quieren contar y hacen uso de la creatividad están potenciando una herramienta de expresión que lleva al oyente al desarrollo creativo, potenciando viajar sin necesidad de movernos del lugar en el que estamos aprendiendo, facilitando así modelos para expresar, crear y comunicar.
Canta, baila y sonríe siempre que puedas, porque si lo haces, tu alumnado tendrá la oportunidad de vivir esa experiencia contigo, pero si solo navegas entre páginas necesarias pero centrada en palabras que otros expresan pero que tú no compruebas, tu alumnado vivirá entre la desidia y las ganas de terminar cada día para salir a la vida de verdad, a la aventura de lo que les rodea, a explotar las posibilidades que le ofrece todo aquello que tú como maestro, le arrebatas.
Estamos empeñados en el uso de estándares educativos que trasladamos a la vida de las aulas, olvidando que los Congresos Educativos y las Aulas están conectados por la magia del movimiento, de la creación, de la aventura… Aulas y Congresos que despiertan el entusiasmo, la atracción, la vivencia y que a veces nos permiten conectar con ese yo interno tímido y escondido tras el niño que fuimos y el que tenemos en frente en nuestras aulas. La comodidad de estar en el lugar correcto sin sentirse extraño, ajeno a lo que se aprende y dejando evidencia de la esencia del día a día.
La Educación conceptual, cerrada y regulada por cantidades etiquetadoras quedó en el olvido, en el pasado de los que no quieren avanzar y ven en el cambio al monstruo que no echará de nuestra zona de confort, el eterno rival de la Educación conformista.
No podemos dar lecciones al amparo de un despacho, de una teoría leída o de un simposio aburrido, en tanto que sí puedo hacerlo analizando las dos vertientes, combinando la objetividad y el juego, la teoría y la música, la investigación y el movimiento.
Es necesario analizar cada palabra que ofrezco antes de expulsarlas sin revisarlas, sin saber que intención cargan o qué emoción contienen. El respeto es la esencia primordial de esas opiniones vendidas al mejor postor, según las modas intelectuales educativas del momento.
Sal a vivir, porque la vida es escuela y a la escuela es vida.
